Municipio de Aculco

Gobierno del Estado de México

Lugares Turísticos

CASCADA DE LA CONCEPCIÓN 

Sobre la carretera Aculco-Amealco a 10 kilómetros de la cabecera municipal, en un paisaje rocoso resalta entre una barranca, una hermosa cascada que se nutre de las aguas de la presa de Ñado y corre sobre una calzada de columnas basálticas. En verano el caudal hace de la caída algo realmente impresionante, llega a alcanzar más de 25 metros de altura. Las paredes de basalto hacen de La Concepción el lugar perfecto para practicar rappel y el campismo.


CASCADA DE EL TIXHIÑU

Sobre la  carretera panamericana existe una desviación donde se llega a la comunidad de San Joaquín, aquí existe una cascada llamada Tixhiñú, muy poco conocida por los habitantes del municipio y menos por los turistas.
Con una caída de  15 mts. aproximadamente, puede aprovechar el día disfrutando de los alrededores, ya que al igual que la cascada de la Concepción, aquí también contamos con un cañón donde se pueden realizar actividades como acampar.

 
LA CEJA Y LA CALZADA 

Se trata de dos sitios naturales situados en los alrededores del pueblo. La Ceja es un hermoso paraje propio para el contacto con la campiña y la observación de aves silvestres que abundan en el ecosistema. Durante siglos fue el lugar designado por la sociedad aculquense para organizar días de campo y luna das. Para llegar a este sitio debe recorrerse una bella Calzada de árboles centenarios que ofrecen al visitante un fresco paseo por la naturaleza.

LA PEÑA DE ÑADO 

En otomí significa “Cabeza de Piedra”, para llegar a este lugar lo puedes hacer a caballo, en bicicleta de montaña, en motocicletas para campo, en cuatrimotos, en vehículos 4X4 o bien disfrutar de una caminata, son aproximadamente 5 km. De brecha la cual disfrutaras en cualquier medio de transporte; Bosque Húmedo y una altura de 2900 msnm.


PARROQUIA Y EX CONVENTO DE SAN JERÓNIMO 
Que data del año 1540, su fachada deriva del estilo tetiqui del siglo XVI, que siguiendo un modelo europeo fue interpretado por el gusto indígena de sus constructores. En el patio central del convento podrá admirarse un reloj de sol que data del siglo XVIII y en la sacristía de la parroquia óleos de gran valor destacando un lienzo de grandes dimensiones que representa la última cena del connotado pintor Miguel Cabrera. En el atrio de la iglesia, ubicado en la poza suroeste se encuentra un reloj público de dos caras, construido en el año de 1904 sobre una torre de tres cuerpos escalonados de cantera.